
Los gastos de emergencia la gran mayoría de las veces llegan cuando menos
los esperamos y menos preparados estamos.
Una reparación inesperada del auto, un gasto extra de los niños en el
colegio, un arreglo en la casa que no da espera, medicinas y gastos
médicos entre otros, pueden ponernos en una muy difícil situación económica
obligándonos a recurrir a préstamos costosos o al uso de tarjetas de
crédito con altos intereses.
La gran mayoría de las familias dependen del ingreso mensual de uno o las dos
cabezas de hogar, y ante una eventual pérdida de empleo, la situación se
complica rápidamente.
Es por ello que los expertos recomiendan tener un colchón
o fondo de emergencia para por lo menos 6 meses de gastos fijos del hogar. Y
hay una razón para ello, seis meses es lo que en promedio le puede tardar a una
persona encontrar un nuevo empleo.
Para lograr ese objetivo, es necesario hacer un presupuesto y ahorrar poco a
poco cada mes hasta lograrlo. Mientras se va avanzando se debe asumir el
compromiso de no tocar ese dinero a menos de que sea absolutamente necesario, y
lo más aconsejable, abrir una cuenta de ahorros separada.
Es muy importante que ese dinero este a la mano en caso de necesitarse y por
ello no es aconsejable abrir un CDT (Certificados de Depósito a Término),
invertirlo en acciones o en un fondo mutuo donde la volatilidad del mercado
podría hacerte perder dinero en el corto plazo o simplemente no te permitirá
acceder a este de forma inmediata.
No te desanimes pensando que juntar tres o seis meses de gastos, es tarea
imposible, simplemente ahorra sagradamente lo que más puedas cada mes o cada
quincena, y el resultado llegará mas rápido de lo que imaginas.
La tranquilidad de saber que tu familia cuenta con ese fondo de emergencia,
será una gran recompensa a tu esfuerzo.